A veces lo que empieza como una locura se convierte en lo mejor de tu vida.
Después de compartir muchos momentos y experiencias inolvidables, decidimos ser más felices. ¡Nos casamos! Comenzamos una nueva aventura y no sería posible celebrar nuestro enlace matrimonial sin la compañía de nuestra familia y amigos.

Tenemos el enorme placer de invitarlos a nuestra boda. Esperando que no se pierdan este día tan especial, ya que su presencia es el mejor regalo que podemos tener.

Así que, a llenar la maleta de sonrisas, buena vibra y muchas ganas de bailar, ¡La pasaremos genial!